Willy Ortiz
ElOcoeño.com
San José de Ocoa
Los habitantes de esta comunidad, considerada la más pobre de esta provincia, viven en medio de una situación muy crítica debido a la falta de ayuda oficial.
Distante a sólo 3 kilómetros de Arroyo Palma y con más de 600 habitantes, en las Lagunetas se alumbran con alambres de púas y no de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
¿Porqué? Se preguntó el ingeniero Agrónomo Taylor Santana. «porque tal vez en esa zona no reside ningún funcionario importante de algún gobierno».
Dijo que tal vez a los gobiernos les interese que migren a la ciudad a delinquir, a buscar dinero fácil.
Los moradores de las Lagunetas sobreviven al apoyo dado por la Asociación para el Desarrollo de Ocoa (ADESJO).
Esta entidad que por más de 40 años dirigió el padre Luis Quinn, ha ejecutado varios proyectos importantes que han mejorado un poco su calidad de vida.
Entre estos, están la construcción de viviendas, sistemas de riego, apoyo técnico en el área de la producción protegida.
Otros aspectos que golpean a los lugareños son la miseria, la pobreza y la falta de una vía de comunicación en buenas condiciones.
«Esta comunidad ha sido muy olvidada, mire esos alambres de púas los trajimos de Arroyo Palma, toda la vida hemos estado sin luz», dijo Marcial Andújar, comunitario.
«Nosotros le agradecemos a la Junta para el Desarrollo, porque todo lo que hay por aquí, es la Junta que lo ha hecho», manifestó Andújar.
