El Ocoeño

Por José Henriquez

En la primavera de 1970, el senador de Wisconsin, Gaylord Nelson propuso una agenda ambiental en U.S.A y la creación del Día Mundial de la Tierra, con el propósito de la restauración de los ecosistemas y la biodiversidad de especies. No obstante, esta propuesta de Nelson, fue objeto de un boicot de parte de John Hoover, Director del FBI, quien creó la intriga de que ese día de la tierra  era usado por los manifestantes ambientalistas porque era la fecha del natalicio de Lenin, el líder de la revolución socialista soviética (rusa); pero, Hoover no logró su maligno objetivo.

Dos años más tarde se realizó la Asamblea Internacional de Estocolmo en procura de la defensa de la naturaleza; pero, fue en el 2009 cuando la ONU declaró el Día Mundial de la Tierra con el objetivo de establecer una agenda mundial para promover la conservación del medio ambiente y una economía verde.

«Estamos ante la posibilidad de una extinción masiva de especies, según últimos informes científicos»; impactantes declaraciones de Greta Thumberg en una cumbre de la ONU., una niña de 16 años que provocó consternación y gritos de los participantes.

También, el Papa Francisco, en la encíclica laudato si, denuncia lo que él denomina cultura del descarte, sobre «la casa común» (que es el planeta tierra, como la llamó San Francisco de Asís) y hace un ferviente llamado sobre el cambio climático: «el cambio climático es un problema global con grandes dimensiones ambientales, sociales, económicas, distributivas y políticas, y plantea uno de los  principales desafíos actuales de la humanidad»…

Visto desde la perspectiva ecológica, el cambio climático es cada día más grave debido a la grieta de la capa de ozono, provocada por la acumulación de gases efecto invernaderos y, por esto, cada día, aumenta el calentamiento global; así, lo confirma el científico Covicci: revelando el aumento sorprendente del calentamiento global.

El tema actual del Día Mundial de la Tierra es «Planeta vs Plásticos», que tiene el objetivo de promover la restauración de los ecosistemas en el planeta; pero, creo que esto no es posible, si no promovemos una educación en torno a eso: al reciclaje, al no uso de plásticos y a la sustitución de estos en el mercado. Según la red del Día Mundial de la Tierra «se producen 380 millones de toneladas de plásticos cada año. Sin embargo, solo  el 9% del plástico producido hasta ahora se ha reciclado». «los plásticos se encuentran en forma de  microplásticos en playas, océanos y hasta en las nubes».

El impacto negativo de los residuos plásticos sobre el medio ambiente en el mundo es sorprendente, sumado a la acumulación de residuos sólidos (basuras), botellas de metales y de cristales de bebidas alcohólicas (que botan los borrachos en lugares públicos y en playas) han aumentado la contaminación ambiental y un impacto contaminante en la biodiversidad de especies en ríos, playas y océanos; así, como los envases de abonos agroquímicos contaminantes de invernaderos y de la agricultura a campo abierto que tiran en los ríos, cañadas y lagunas son demoledoras para la flora marina, la biodiversidad de especies y el agua potable para uso humano. Es evidente que esto surte efectos negativos sobre la  denominada seguridad alimentaria.

Pues, propicio es el  Día Mundial de la Tierra para pedirle   a la Comunidad Internacional y al gobierno de Estados Unidos profundizar los programas de reducción de gases efectos invernadero, de la aplicación de abonos agroquímicos (sustituyéndolos por abonos orgánicos), la desertificación, la deforestación, las basuras y la acumulación excesiva de plásticos.

Planeta vs plásticos!!!…. Un reto de todos!!!